A veces es mejor llegar tarde que no llegar. Que se lo digan a los estadounidenses de ' Para toda la humanidad ', el originalísimo culebrón espacial de Apple TV+ que va camino de una quinta temporada y donde todo es tan real, tan plausible, que solo puede ser ficción. Ahí están los americanos, julio de 1969, atentos a la pantalla para ver al primer humano poner un pie en la Luna. Es el capítulo 1, la primera escena, así que no hay destripe si se cuenta que el «pequeño paso...» no es el de Neil Armstrong sino el de un cosmonauta soviético. Ante el fracaso, la respuesta: una bandera más alta en el jardín y una hamburguesa más grande en el plato. De derrota en derrota hasta la victoria final. Y así, en cada temporada, década a década, el mundo real de la ficción, que es como el nuestro pero diferente, avanza empujado por la fe en la ciencia y el orgullo patriótico de triunfar en una carrera espacial que nunca se dejó de correr hasta Marte y más allá. Y así, esta 'Para toda la humanidad' se convierte en un pequeño refugio para los crédulos de aquella vieja ciencia ficción en la que lo más espectacular, lejos de las explosiones y las batallas épicas, estaba en imaginar cómo los guionistas se tenían que romper las puntas de los lápices para crear mundos reales. Noticia Relacionada visto y no visto opinion Si La clase media Ignacio Ruiz-Quintano Estado de las clases sociales en España: por debajo de los once mil, a dormir al ojo de un puente sin más ropa de cama que el «pajaporte» de EscriváEso es lo difícil, inventar fantasías que encajen como un guante a nuestra realidad. La moda en pantalla va por otro lado, uno más inerte; Rodrigo Cortés cuenta que hay películas muy sencillas con una envoltura que las hacen parecer complejas para que cierto espectador se crea muy listo. Se da entonces el fenómeno de ese cuarentón, camiseta de Marvel desgastada, creyéndose físico molecular por utilizar «teoría de cuerdas» al hablar de la serie de 'Vengadores' con su madre. Porque es precisamente el nuevo Marvel de Disney el que inoculó un virus letal contra la imaginación y logró uniformizar, a mayor gloria de sus ejecutivos, una forma de hacer fantasía que ha agotado hasta a sus fans más listos. Este verano será el primero sin serie de Marvel y la única novedad del UCM es la película que ha hecho el pobre Hugh Jackman con Ryan Reynolds en la tercera de Deadpool. El pobre Jackman, que se jubiló hace 7 años ('Logan') de un personaje que ya le quedaba viejo, lo justifica, cómo no, con el multiverso. Al menos en la Luna de 'Para toda la humanidad' habita la coherencia.